Masterclass Fotografía de Naturaleza con Héctor Cordero – Ávila, agosto 2025

“Fotografiar en modo manual te permite tener el control total de la luz, el enfoque y la creatividad en cada imagen”.

Agosto 2025. Por fin hemos dado el gran salto. Pasar de solo utilizar el modo automático de nuestras cámaras fotográficas para utilizar también el modo manual. Todo un reto.

Nos gustan las cámaras fotográficas. Bueno, nos gusta más fotografiar pajaritos, pero son pequeños, se posan lejos de nosotros y echan a volar en cuanto nos detectan. Motivo por el cual con el móvil ya no es suficiente para continuar con esta afición. Por eso nos hemos equipado con una cámara fotográfica «de verdad». Yo llevo la Canon Powershot SX 70 HS.

Saber de pájaros no es gran problema. Llevamos en el móvil la aplicación Merlin que es de gran ayuda. Además, Antonio —mi «profe» de pájaros— ha asistido a muchas de las visitas guiadas de Nacho Sevilla y Pipe Nebreda, así es que ya tiene una buena base como para identificar a las aves que nos encontramos en nuestras tardes de pajareo.

Por suerte, en junio 2025 nos trajeron a Ávila a Héctor Cordero, con quien pudimos aprender —bueno, más bien, intentar comprender— los pasos a seguir para fotografiar a los vencejos que en esa época son tan abundantes en Ávila.

Pero no ha sido hasta este mes de agosto, cuando nos hemos apuntado a una verdadera clase de fotografía para ver si de una vez fijamos el concepto del «triángulo de exposición».

Que sí. Que la teoría está muy bien. Que hay tres parámetros: ISO (sensibilidad) – Apertura del diafragma (foco D*) – Velocidad de obturación (1/1000…1/4 segundos). Pero que a la hora de utilizarlo en la realidad es más complejo. Porque hemos dicho que vamos a dejar de usar el modo A (automático), donde la cámara selecciona estos parámetros para nosotros, para usar el modo M (manual), donde nosotros le complicamos la vida a la cámara con el ruido, la profundidad de campo y el movimiento 🙂

*Corrección que me hace Héctor: «La apertura del diafragma no es el foco, si no el número f, que viene de la fórmula:

Por eso, cuanto más grande es la apertura del diafragma (D), menor es el Número f.

Entonces es cuando dices que sí, que ya lo has entendido —somos educados y no queremos retrasar la clase por nuestra inseguridad— y llega Héctor y te desmonta todo lo aprendido con fotos impresionantes.

Es un amante de la naturaleza, algo que notas en cuanto te cuenta cosas de su niñez en su pueblo natal de Coria (Cáceres), y por que es Biólogo. Ha vivido durante siete años en Estados Unidos, donde ha cosechado grandes premios científicos por sus trabajos de fotografía relacionados con estudios sobre el “impacto” de las aves con los enormes edificios de cristal de Nueva York. Además por poseer un extenso currículum, el cuál podéis consultar en su web CorderoNature.com

Todo eso le da un dominio para la fotografía de aves que de repente manda al traste el intocable «triángulo de exposición». Y aplicando su creatividad, junto a alguno de los múltiples «aparatos» que nos mostró durante el curso, consigue instantáneas espectaculares.

Pero nosotros hemos venido a este curso a aprender. A sacar el máximo partido de este y de todos los cursos que se pongan a nuestro alcance. Para que seamos capaces de fotografiar cada vez mejor a estos seres alados que tantas alegrías nos dan su contemplación.

Y por eso tratamos de ser esponjas. No solo para empaparnos del conocimiento de Héctor, sino también de los compañeros del curso. Como de Jose (de Palencia) que siempre está atento para resolver los problemas que nos surgen. O del resto de compañeros como Jaime, Conchi, Pedro, Antonio, Enrique… que nos echan una mano a Miguel, Jessica, Antonio, Lourdes, Pilar y Javier cuando nos atascamos.

De momento hemos sido capaces de hacer los ejercicios, más o menos, que nos iban indicando. Cambiar el foco, variar el ISO, modificar la velocidad de obturación, fotografiar con luz artificial, fotografiar con luz natural, fotografiar con el sol delante modificando la profundidad de campo…. y un largo etcétera de temas tratados en este intensivo curso.

Ahora nos tocará repetir «sólos», sin profes ni compis que nos puedan ayudar a corregir los parámetros, lo aprendido para que las fotos queden, más o menos, aceptables para nuestro álbum.

¡Y que los pajaritos tengan paciencia para que posen un poco más!

Seguro que eres un experto fotógrafo —o lector de este blog— y no te importará dejarnos tus opiniones en la sección Comentarios. Las leeremos con mucha atención.

¡Hasta el próximo pajareo!