El Arroyo Gemiguel y el Molino Vadillo (Ávila) – noviembre 2025

Distancia: 8,95 km | Desnivel acumulado: 196 m | Tiempo: 2 h 36 min

Track circular: Venta de la Tortilla – Camino de Guterreño – Hoya de las Quibanas – Cañada de Sonsoles – Dejesa de la Serna – Molino Vadillo – Venta de la Tortilla.

Álbum de fotos de la ruta:   Javier Hernández y colaboraciones.

Noviembre 2025. Continuamos descubriendo caminos próximos a la Sierra de Yemas. Hoy hemos realizado una ruta circular donde el gran protagonista ha sido el Arroyo Gemiguel y el Molino Vadillo.

El Arroyo Gemiguel forma parte de la red fluvial que alimenta al río Adaja, que recorre el Valle de Amblés y la ciudad de Ávila, desembocando finalmente en el río Duero. Nace en el término municipal de Riofrío, en un entorno natural que incluye fuentes y zonas de dehesa, típicas de esta cuenca.
El Arroyo Gemiguel tiene importancia tanto ecológica como histórica, ya que su caudal ha sido tradicionalmente aprovechado para usos agrícolas, riego y el funcionamiento de molinos harineros, entre ellos el Molino Vadillo, ubicado cerca de la carretera AV-900 y la Aldea del Rey Niño.

En los documentos oficiales de la Confederación Hidrográfica del Duero, el arroyo aparece registrado como parte de las masas de agua superficiales gestionadas por esta administración, con un seguimiento específico en calidad de agua y gestión ambiental.

Comenzamos a caminar siguiendo el camino de Guterreño, de dominio público y que da acceso a grandes fincas que se distribuyen a uno y otro lado. En otra ocasión trataremos de llegar hasta el Caserío de la Pavona, pero necesitamos que nos guíe alguien que conozca bien el sendero.

Porque luego ocurren cosas como esta, que a los dos kilómetros de nuestra partida una puerta cerrada, que daría al Caserío de Guterreño, nos impide el paso y nos toca vadear el Arroyo de la Nava para no irrumpir en propiedades privadas.

Nuestro objetivo es coger el camino público que nos llevará hasta la Hoya de las Quibanas, pero esto nos supone dar un rodeo siguiendo los ramales del arroyo hasta llegar a suelo en buen estado para caminar.

Volviendo un poco en sentido contrario de nuestra marcha, nos acercamos hasta el caserío con la intención de preguntar si había otra forma más sencilla de paso, pero no vimos gente y tampoco queríamos molestar. Dimos media vuelta y continuamos con nuestro paseo.

La Cañada de Sonsoles discurre bordeando la Dehesa de Gormaz, pero sabía de una puerta que nos ahorraría camino para regresar hacia nuestro punto de salida. Siempre me pasa lo mismo, que pienso que esta puerta está más cerca de la parte alta de la dehesa y siempre paso a su lado sin verla.

Afortunadamente el campo tiene mucho pasto, gracias a las pasadas lluvias y no hay suficientes pistas para encontrarla. Pero no nos importó. El día estaba siendo muy agradable —es lo que tiene los días soleados—, el paisaje una maravilla y las charlas que llevábamos en este punto nos hizo subir unos cientos de metros buscando otro paso por donde cruzar la alambrada. Fue al bajar cuando vimos la puerta y aprovechamos para marcarla en nuestros GPS.

Al salir de la Dehesa de la Serna, siguiendo la Cañada de Sonsoles, nos acercamos a ver las ruinas del Molino Vadillo, que funcionaba gracias al agua que traía el Arroyo de Gemiguel. Varios dijeron que de pequeños venían a este río a bañarse en la época veraniega. Viendo el nulo caudal que trae es difícil imaginar cómo podría ser una zona de baño. Pero viendo las dimensiones del caz* sí podemos imaginar que en otra época este río llevase un caudal importante.

*El caz de un molino hidráulico es un canal o conducto artificial que se crea para desviar y conducir agua desde un curso natural hacia el molino. Su función principal es suministrar de manera controlada y constante el agua necesaria para que la rueda hidráulica del molino funcione correctamente. El caz generalmente se bifurca del río o arroyo por encima del molino, llevando el agua hasta una balsa o cubo de presión desde donde el agua cae o impulsa la rueda del molino para mover la maquinaria destinada, por ejemplo, a moler cereales.

Después de caminar durante dos horas y media —modo paseo otoñal ¿eh?— y recorrer casi nueve kilómetros, llegamos al lugar donde teníamos los coches. Es el momento donde cada miembro decide qué hacer. Si tomar algo en la venta, regresar a casa pronto, aprovechar un poco más el día y sentarse a charlar —aún más jejeje— al pie del vehículo…

Es lo que tiene este grupo de #SenderismoFácil, que no hay obligación de ningún tipo después de realizar la ruta, así la gente es libre de ver cómo ocupa el resto de la jornada.

Por mi parte, daros las gracias una vez más por vuestra participación.

¡Hasta la próxima ruta!

*Añadido: Miguel, gracias a lo que nos contaste de los (des)poblados allá por los siglos XI-XVI he encontrado bibliografía que trata de ello. Muy interesante y que en algún momento retomaremos.

¿Sabíais que Gemiguel se llamaba Xemenmigael*?

*Xemenmigael en Ávila es una de las aldeas que en el año 1250 formaban parte del «cabildo de Valle Amblés», una división administrativa dentro del Arcedianato de Ávila. Aparece documentada junto con otros pueblos en un listado realizado por el cardenal Gil Torres para las Constituciones del Papa Inocencio IV. Su origen podría remontarse a la época romana, dada la proximidad a restos arqueológicos y a una antigua calzada romana que conectaba Talavera con Ávila, visible aún en algunos tramos de la zona (…)