Navarredonda de Gredos (Ávila) – septiembre 2025 (2 de 2)

Viernes — Distancia: 20,13 km | Ascenso*: 253 m | Tiempo: 1 h 49 min

Sábado — Distancia: 24,45 km | Ascenso*: 319 m | Tiempo: 2 h 46 min

*En ciclismo sólo consideramos el desnivel positivo.

Track (viernes): Albergue Juvenil – Navarredonda de Gredos – Casa del Parque de Pinos Cimeros – Hoyos del Espino – Área recreativa Tambosríos** – Prado de Navahondilla – Albergue Juvenil.

**Entramborríos

Track (sábado): Albergue Juvenil – Camino de Piedra Picada – Puente del Duque – Las Maliciosas – Garganta de Valdeascas – GR 10 – Collado del Cepegato – Fuente Tormella – GR 10 – Parking Puerto del Arenal – Carretera Av-941 -Albergue Juvenil.

Álbum de fotos de la ruta: Javier Hernández y colaboraciones.

Punto de encuentro: Albergue Juvenil de Navarredonda de Gredos (Ávila).

Septiembre 2025. Veinticuatro horas de #ClismoFácil en Navarredonda de Gredos, el pueblo que se considera pionero en el turismo de calidad en un enclave natural, gracias a la inauguración del Parador Nacional de Turismo en octubre de 1928.

«La llegada del Parador supuso modernización: se construyeron nuevas carreteras, llegó el teléfono, se instaló una gasolinera y mejoraron los servicios básicos, factores que cambiaron la economía rural tradicional hacia una de servicios turísticos y fijaron la población. Además, la presencia del Parador potenció la promoción del patrimonio y la riqueza natural de la zona, situando a Navarredonda en el mapa nacional y fomentando la creación de nuevos negocios y actividades orientadas a los visitantes de la Sierra de Gredos.» (Fuente Paradores)

sábado 20 septiembre, 08.50h

A las ocho menos diez ya estábamos despiertos y recogiendo todo el material de la habitación. El desayuno no comienza hasta las nueve de la mañana, así es que aprovechamos para dar un paseo por los alrededores del albergue.

Tenemos un día típico de esta zona. Cielo azul, temperatura «fresca» y todos los sonidos que se recogen dentro de los pinares de la zona. Este viaje nos está evocando nuestra infancia de «campamentos», y los sonidos que percibimos refuerzan aún más aquellos recuerdos.

El comedor es comunitario. Como cuando salíamos de nuestras tiendas de acampada y nos dirigíamos al «desayuno». El olor a pan tostado y a café recién hecho nos llenan de energía. Pero la sorpresa nos la dan nuestros compañeros de mesa. Rocío y Manolo son expertos en estas situaciones, y nos han invitado a tomate natural y jamón recién abierto para acompañar nuestros panecillos recién tostados. ¡Gracias amigos!

Desayunando en el comedor del albergue.

sábado 20 de septiembre, 10:30h

Los ciclistas que han viajado desde Ávila han sido más que puntuales. A la hora prevista —las diez y media 😉 — ya estábamos todos listos para comenzar una ruta que traíamos grabada en nuestros dispositivos.

Una cosa es ver la ruta en la pantalla del ordenador, en vista satelital, y otra muy distinta es recorrerla a «lomos» de las bicicletas. Nada tiene que ver el paisaje que nos vamos encontrando con las frías imágenes que nos ofrecen las vistas aéreas en 2D. Ni los caminos tienen el mismo aspecto. Donde ves amplias vías, la realidad te sitúa sobre sendas estrechas o caminos llenos de piedras que obligan a mantener la atención en todo momento.

Hemos comenzado la aventura que tantos días llevamos preparando desde nuestras casas y eso nos hace llevar una sonrisa permanente en la cara. Algunos, incluso, damos algún gritito para soltar todo el estrés acumulado. ¡Cosas mías, no tengáis preocupación por ello!

sábado 20 de septiembre, 12:29h

Llegar hasta el nacedero —fuente— de un río es un objetivo que nos marcamos mi compañero Agustín y yo hace algunos años. En esta tabla vamos marcando con un tik o check los ríos que ya hemos geolocalizado su nacimiento, dejando constancia fotográfica de ello.

El río Tormes pertenece a la Confederación Hidrográfica del Duero —CHD— y es uno de los que nos faltaban por visitar. Uniendo dos actividades que nos van de maravilla, senderismo y ciclismo, hemos logrado un hito más en nuestra larga lista de ríos por visitar.

En tan sólo dos horas desde que comenzamos a pedalear, nos hemos situado en Navapalenciana. Aquí se encuentra el hito con la señal que indica el nacimiento del río Tormes. Llama la atención un tótem moderno en el mismo prado, señalando de forma sugerente esta zona tan atractiva para nosotros.

Que se vayan preparando los ríos Arevalillo, Trabancos y Zapardiel porque el día menos pensado…

sábado 20 de septiembre, 15:22h

Parte del grupo se ha quedado en el Puente del Duque, donde habían reservado para comer, para disfrutar un poco más de este maravilloso lugar. Por muchas veces que lo visites, siempre encontrarás cosas nuevas.

Por mi parte, he decidido volver por la carretera que va de la Venta del Obispo hasta Navalmoral. Sí, la AV-905 ¡una locura! Cada vez que miraba el cuenta kilómetros del navegador siempre me quedaban los mismos. Es como si no avanzara. Incluso seguro que hasta aumentaron en algunas unidades.

Hubo un momento que reconocí que no había sido una buena idea tomar este camino. Pero según pasaba por Hoyocasero, Navalosa, Navatalgordo… me vinieron los recuerdos de mi recorrido por aquí caminando siguiendo el GR 10 que tantas veces menciono. Fue como volver a revivir aquellas catorce etapas que realizamos en todo un año.

Tal es así que tuve que parar al borde de la carretera en dos ocasiones para disfrutar del Valle del Alberche. Me llamó la atención los grupos de árboles de distintas tonalidades verdosas y amarillas que divisaba desde estas altitudes. ¡El otoño está llegando!

En el Puerto de Navalmoral hice una nueva parada. Ahora recordaba la vez que fuimos caminando en busca del nacedero del río Mayor, del que tantas veces hemos hablado en este blog.

Fue cuando llamé a mis compañeros de ruta —aún seguían celebrando la etapa del día—.

Antonio me dijo —fíjate bien en los caminos que por ahí tenemos que hacer algo.

Puerto de Navalmoral. Vista hacia el NO

Y en esas estamos. Buscando nuevas oportunidades, cualquier excusa nos va bien, para organizar la siguiente salida. Somos un grupo de que alternamos el Senderismo Fácil con el Ciclismo Fácil —ahora nos denominamos SendiClismo Fácil, fíjate qué tontería—.

Gracias, chicos, por vuestra asistencia. Ya sabéis que somos unos disfrutones de la naturaleza, la buena compañía y el ejercicio físico.

Mantened a punto vuestras bicicletas que, aunque estemos en otoño/invierno, seguiremos recorriendo lugares de nuestra Provincia. Como solemos decir ¡no hace frío, lo que ocurre es que llevas poca ropa de abrigo! 🙂

Miguel, Jose, Antonio, Javier y Víctor.

¡Hasta la próxima cicloruta!

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