El día que probé una bici de gravel (Ávila) – septiembre 2023

Distancia: 24,66 km | Desnivel acumulado: 398 m | Tiempo: 1 h 28 min

Álbum de fotos de la ruta Javier Hernández

Track: Ávila – Santuario Nuestra Señora de Sonsoles – El Fresno – Ávila

Septiembre 2023. Tenía que ocurrir, tarde o temprano. He probado mi primera eBike. ¡Y, además, ha sido una bicicleta de gravel!

Una cosa antes de empezar. Este no es un artículo para expertos. No tengo los conocimientos suficientes para hablar de las bicis de gravel, y menos de las eléctricas como es la Wilier Hybrid Jena que he podido probar gracias a Carlos Ruíz, propietario de la tienda Tubular Bikes en Ávila.

Para eso están Carlos y el resto de su equipo, como Adrián González y Pablo Sánchez, que podrán darte todo tipo de explicaciones técnicas, constructivas, de manejo… y un sinfín de preguntas que quizás te surjan si llegas al final de este artículo.

Y ahora sí. Comenzamos.

Manejabilidad en ciudad

Cuando me dijeron que podía disponer de la bici durante un par de horas me planteé qué quería probar. Enseguida pensé cómo sería mi conducción por la ciudad, entre los coches, por el polémico carril bici que han instalado en algunos barrios, cómo soportaría el contínuo traqueteo al rodar sobre el pavimento adoquinado de las calles céntricas.

Como véis, mi principal preocupación era si iba a ser capaz de salir de la ciudad sin tener ningún percance. Aún estoy en fase de adaptación a las calas y eso de ir «atado» a los pedales es algo que siempre tienes en la cabeza.

Ávila es una ciudad ideal para el ciclismo. En pocos minutos tienes campo y pistas de tierra para disfrutar de un paseo. Y esa fue mi siguiente elección.

Siguiendo los consejos de Ángel G., mi asesor de todas las cuestiones relacionadas con el mundo de la bici, cogí el camino de sonsoles. Qué mejor camino para probar una bici de gravel.

Rodando por pistas de tierra

Tenía claro que iba a utilizar la asistencia eléctrica de la bici en todo momento. Es un error salir pensando en la batería todo el rato. No iba a desaprovechar la ocasión de comparar cómo se rueda con esta ayuda adicional. Y comienzan a fluir las primeras sensaciones.

Se pierde mucho tiempo debatiendo si el iPhone es tan bueno como dicen ¡con gente que nunca ha probado un iPhone!. Pues con las eBike ocurre lo mismo. No hables de bicis eléctricas con quien piensa que no se hace ejercicio o «cuñadadas» por el estilo.

Asegúrate antes de que ha probado alguna bici con asistencia al pedaleo. Que hay gente que piensa que esto es como un vespino, que sólo se usaban los pedales cuando te quedabas sin gasolina (ya os dije que este artículo no era para expertos ¿eh?).

Por supuesto no voy a negar que la asistencia al pedaleo por batería es una realidad. De otra forma no hubiese conseguido un nuevo récord personal (RP) en Strava. Basta con ver los tiempos que suelo hacer con mi bici Trek Marlin 6 (aunque veo que voy mejorando), pero impensable bajar de cuatro minutos en este tramo de 940 m de longitud, 77 m de desnivel y que termina en una pendiente del 8,2%.

Pero llegué jadeando y dándolo todo porque quería terminar de subir la cuesta cuanto antes.

Comportamiento como bici de carretera

Otra de las pruebas que me recomendó «angelillo» fue que probase el comportamiento de la bicicleta por asfalto. Que estuviese atento a la direccionabilidad y a la rumorosidad (supongo que se refería al ruido de los neumáticos ¿…?).

Lo que hice fue regresar por la carretera N-403 (Ávila-Toledo), en una cuesta abajo donde la bici se lanza todo lo que tú quieras. Yo soy de los de frenar en las bajadas, así que comprobé la seguridad que te da agarrar la parte baja del manillar (¡buena idea de quién lo diseñó!) y probar los frenos de disco. ¡Otro gran avance del mundo de las dos ruedas!

Consulté mi GPS Suunto 9 y sólo llevaba 30 minutos desde que salí de la tienda y 8 km recorridos. Decidí que tenía que seguir probando por asfalto pero pedaleando, que cuesta abajo no hace falta :-).

Fue cuando decidí dirigirme hasta la localidad de El Fresno. Es una carretera con un firme excelente y un arcén ideal para ir en bicicleta. No es de extrañar que sea uno de los recorridos más frecuentados por las grupetas abulenses.

Aunque tuve viento de cara no me molestó. Recordad que en todo momento llevé la asistencia eléctrica activada. Un sencillo click sobre el mando situado en el manillar y problema resuelto.

Caminos de tierra con baches y en mal estado

Fenomenal.Todo de maravilla. Pero ¿qué ocurre al circular por firmes irregulares?. Decidí regresar por lo que llamamos «el camino del vivero». En realidad se trata del Cordel Calzadilla de Niharra. Una recta de unos 5 km con una pista con «dientes de sierra» por las ruedas de los tractores y zonas descarnadas por las escorrentías de las lluvias.

Está claro lo que ocurre, que al no llevar amortiguación son tus brazos y tus piernas quienes se llevan los primeros impactos que te devuelve el terreno. La bici no absorbe estas diferencias de uniformidad. Solución: agarrar bien el manillar, ponerte de pie y a pasar el trecho lo mejor que puedas.

De nuevo en la ciudad

Entré por el Puente Adaja y decidí subir por la Avenida de Madrid. Sí, sí, como lo estás leyendo. Me hice muy bien a la bici y tenía la confianza suficiente, gracias a la asistencia eléctrica, para subir por esta carretera junto al numeroso tráfico que siempre tiene.

No. No voy a subir a 30 km/h, según el límite de circulación en esta vía, pero puedo subir con la cadencia suficiente como para no interferir en el discurrir del tráfico.

Y dentro del casco urbano, tuve sensaciones muy buenas circulando por la Avenida de Portugal, Calle Arévalo, Plaza de Santa Ana, Calle Cristo de la Luz y Paseo San Roque, sede de Tubular Bikes.

¿Y ahora qué?

Llegué a la tienda Tubular Bikes después de realizar un recorrido de cerca de 25 km durante hora y media. Paré bastante para pedir a la gente que me sacasen alguna foto para este reportaje. Paré en Sonsoles y en El Fresno. Paré para fotografiar a los caballos que de camino quisieron saludarme desde la seguridad de su cercado. Viví una experiencia a fuego lento cocinada con sonidos de paisaje y golpes de pedal.

Quiero decir con esto que se puede disfrutar de la bici y de la observación al mismo tiempo. No todo tienen que ser «mejor tiempo» ni «rey de la montaña».

Y si la pregunta es ¿cambiarías tu BTT por una bici de gravel? la respuesta sería…

Da igual lo que yo hiciera. Mi elección no tiene que ser la misma que la tuya. O quizás sí. Seguro que la respuesta de ambos sería distinta dependiendo del estado de ánimo.

¡Chicos de Tubular Bikes!: seguid así. Formáis un GRAN EQUIPO.