Morezón (2.389 m), Navalperal de Tormes (Ávila) – agosto 2021

Distancia: 14,58 km | Desnivel acumulado: 1.166 m | Tiempo: 6 h 47 min

Track : La Plataforma – Prado de Barbellido – Puerto de Candeleda – Refugio del Rey – Cerro de la Cagarruta – Morezón – Cuento Alto – Camino de la Laguna – Llano Barbellido – Reguero Llano – La Plataforma

Álbum de fotos :  Michel Martín y Javier Hernández

Agosto 2021. En verano solemos hacer alguna excursión por nuestra Sierra de Gredos. Si en agosto 2020 fuimos a la Laguna Grande, en julio 2019 subimos al Morezón. La primera vez que subimos fue en junio 2016, pero en aquella ocasión no escribimos ningún artículo como el que estáis leyendo ahora.

A través de nuestro grupo de Telegram lanzamos la idea de regresar al Morezón antes de finalizar agosto. Y hemos necesitado hasta tres intentos para poder realizar esta ruta. Gracias a Michel (una vez más) que no quiso que hiciese la ruta en solitario y me envió un mensaje que me alegró mucho recibirlo: —Mañana a las 8 estoy en La Plataforma—

Con una puntualidad digna de mencionar, mientras me econtraba desayunando al pie de mi furgo, apareció él coduciendo su corcel blanco, con la sonrisa de quien acude a socorrer a alguien que ha pedido su ayuda.

He reallizado muchas rutas con Michel. La última fue cuando me invitó a la de Navalosa en mayo 2021. Es una de las cinco personas que más me ha acompañado en el proyecto miGR10AV y este blog está lleno de fotografías suyas.

Pero si queréis conocerle más en su faceta de anfitrión os recomiendo esta lectura, «El hijo de Don Julián. Historia de cómo conocí Aldeanueva de Santa Cruz y el antiguo Convento de Las Monjas» que, en cierto modo, escribimos juntos.

Y así, recordando todas estas cosas, hemos llegado hasta el Puerto de Candeleda sin darnos cuenta. Es lo que pasa cuando se camina en buena compañía mientras se mantiene una conversación muy agradable.

A pesar de llevar el track en nuestros dispositivos (Wikiloc y Suunto) apenas nos hizo falta consultarlo. Este camino está muy bien marcado al tratarse de un camino frecuentado por los senderistas que nos acercamos a practicar #SenderismoFácil en Gredos.

Hay muchos hitos y otras indicaciones que te facilitan la orientación en todo momento. Sí que es verdad que hay que tener claro hacia dónde se va. Recordad que es la tercera vez que pasamos por aquí y eso, quieras que no, ayuda bastante y te da la confianza suficiente para saber si vas por buen camino.

A las diez y media ¿casualidad? llegamos al Refugio del Rey. Una parada para comer algo y después beber un buen trago de agua fresquita en la fuente. Una bendición que a estas alturas del mes de agosto hayamos podido refrescarnos en las tres fuentes que nos hemos encontrado durante el camino.

Una hora más tarde ya estábamos haciéndonos fotos en la cima del Morezón, con los picos Almanzor y La Galana como fondo del decorado. Los que habéis subido hasta aquí seguro que coincidiréis con nosotros que es el lugar donde mejor se disfruta de las vistas del Circo de Gredos.

Os recomiendo que veáis todas las fotos del álbum.

Nos gusta hablar con la gente que nos vamos encontrando. Como hicimos con los integrantes de este grupo de arenenses que estaban en la cumbre disfrutando de un momento de relax, junto a sus mascotas, después de la subida. Se notaba que tenían experiencia en estos temas (sobre todo Mario) y que estaban acostumbrados a realizar ascensiones de este tipo. Gracias chicos por la conversación y por las fotos.

O este otro grupo de jóvenes treinteañeros (informáticos los tres) que habían subido desde La Laguna después de una noche de chupitos y algo de fiestecilla. Es lo que tiene la juventud, que te da energías suficientes para subir al Morezón, salvando un fuerte desnivel, y después tomar unas latas de cerveza que llevaban en sus mochilas. Muy amables por vuestra invitación.

Recordad chicos, no hackeeís este blog, que estamos cumpliendo nuestra palabra de sacaros en una foto muy chula 🙂

Regresando a La Plataforma por la Cuerda del Cuento hicimos un alto en la Fuente de los Cavadores. Allí nos comimos el bocadillo. Aproveché para quitarme las botas y meter los pies en el agua fresquita de la fuente. Es una costumbre, Javi G., ya lo sabes.

Al reemprender la marcha vimos que Gaspar «Gaspi» bajaba muy rápido de regreso de su ruta a la Portilla del Rey. Nos lo habíamos encontrado en la Plataforma por la mañana y subimos juntos hasta el desvío del Pluviómetro. Lo de subir juntos es una forma de decirlo, porque Gaspi pone un ritmo que te quita la palabra (y ya es difícil en mi caso).

Michel me vio tan convencido de «atajar» por el Refugio de Reguero Llano que accedio a cambiar un poco el plan previsto. Llevo muy mal el empedrado del Camino de la Laguna, y prefiero evitarlo siempre que puedo.

Eso sí, ni se os ocurra seguir nuestro track desde el kilómetro 12,4 al 13,2. ¡Y muchísimo menos si las piedras están húmedas!

*Anécdota: lo que no ocurre en cinco horas puede ocurrir en cinco minutos. Pasada la fuente del refugio Reguero LLano, cuando quedaba muy poco para terminar la ruta, metí el pie izquierdo en un agujero que me hizo caer de bruces contra Michel y su mochila, clavando mi rodilla derecha en tierra y llevándose un buen golpe (estoy bien, tranquilos).

Va a ser cierto lo que dice Ewan Mcgregor en Long Way Round: «La mayoría de los accidentes ocurren en el 5% del final de la aventura».

Después de tomar una cerveza (0,o ¿eh?) en Puente del Duque, Michel y yo nos despedimos por regresar por caminos distintos (y porque yo voy a paso tortuga con el coche, por qué no decirlo).

Al pasar por el Parador de Gredos, decidí parar en la cafetería y tomar algo. Fue una especie de celebración por lo bien que había salido todo.

¡Hasta la próxima ruta!